Un presupuesto dental es un documento que permite calcular cuánto va a costarte un tratamiento odontológico en una clínica determinada. Es una herramienta clave para decidir si realizas el tratamiento o no, en la que importan muchas más cosas que el precio. ¿En qué hay que fijarse en un presupuesto dental?
Por escrito, antes del inicio del tratamiento
Aunque tu dentista te explique en su gabinete qué trabajos considera necesario que te realices, no te dará información sobre su precio hasta que la clínica elabore un presupuesto dental por escrito. Exige que te entreguen este documento siempre antes del inicio de cualquier tratamiento.
Presupuestos sin sorpresas
En todos los casos, un presupuesto dental debe incluir solo los tratamientos que te ha recomendado el odontólogo en su gabinete: sospecha si en el presupuesto aparecen servicios de los que no te había informado tu dentista.
Un presupuesto es un documento que se elabora en la primera visita al dentista, sin coste adicional para el paciente. Un presupuesto dental debe ser gratis.
Desglose y el importe total
En un presupuesto dental serio, además del precio total, deben desglosarse todos los servicios que vayan a realizarse, junto a su coste correspondiente. Algunos dentistas no incluyen todos los servicios en su presupuesto o camuflan varios bajo el mismo concepto.
Condiciones de financiación
En un presupuesto (o adjunto a él) deben aparecer con claridad las condiciones de pago por un tratamiento, y a qué opciones de financiación te da acceso tu clínica dental, para aquellos servicios que requieran un desembolso de cierta cuantía.
Demanda buena información
La razón de ser de un presupuesto dental es darte la información sobre los tratamientos y su coste para que tomes la decisión de realizártelo o no
Las clínicas de calidad incluyen material explicativo del tratamiento junto al presupuesto, para que el paciente pueda tomar una decisión lo más informada posible. Exige esta información para estudiarla con detenimiento fuera de la clínica, si lo necesitas.
Es muy recomendable que se incluya un odontograma (un “mapa” de tus dientes) para que puedas entender con más claridad el tratamiento que necesitas.
Presupuestos sin compromiso
Hasta que no lo hayas firmado, nadie está autorizado a tratarte la boca y mucho menos a exigirte algún desembolso por adelantado por los servicios que se propone realizarte. No aceptes presiones para aceptar tu tratamiento cuanto antes si tu clínica dental no es capaz de darte un motivo convincente.
Huye del “todo o nada”
Un presupuesto es un documento informativo, con una o varias recomendaciones de tratamiento para el paciente. No hay ninguna obligación de aceptar todos los servicios que se incluyen en un primer presupuesto: la decisión sobre tu boca es tuya, y el trabajo de tu clínica dental, adaptarse a ella sin imposiciones.