Respirar por la boca es uno de esos malos hábitos que antes o después generan problemas de maloclusión serios que llevan a la necesidad de una ortodoncia. Las vegetaciones, las rinitis alérgicas y otros problemas que dificultan la respiración nasal llevan a que se produzca esta situación durante la infancia, la adolescencia o incluso en la juventud y la edad adulta.
Síntomas del síndrome ocluso-postural
Esta situación conlleva la aparición de una serie de síntomas que afectan al sueño, como el rechinar de dientes, roncar o que se produzcan contracturas musculares en la espalda, las cervicales o el cuello. Y durante el día:
- Dolores de cabeza.
- Ojeras o sensación de cansancio, ya que el sueño no ha sido reparador.
- Chasquidos de la mandíbula al masticar.
- Bostezar o abrir la boca.
Son los síntomas propios de lo que los odontólogos denominan síndrome oclusivo-postural y que es una causa frecuente para la realización de una ortodoncia en adultos. El problema es que se ha producido una desviación de la mandíbula de su posición normal, lo que además puede generar problemas de masticación y deglución, asociándose además a una deficiente higiene dental y, como consecuencia una mayor incidencia de caries y enfermedad periodontal.
Y si no se trata, el problema irá en aumento, especialmente en lo que respecta al dolor de espalda, de cervicales y cuello, así como el de cabeza y los problemas de sueño. Sólo los dolores de espalda son la causa de un 20% de bajas laborales.
Tratamiento del síndrome ocluso-postural
El tratamiento del síndrome ocluso-postural contempla tres aspectos importantes:
- Resolver, en caso de que exista, el problema que impide o dificulta la respiración nasal o iniciar la reeducación del paciente cuándo no existe una causa aparente para que respire por la boca.
- La relajación neuromuscular también es necesaria para relajar la tensión que se produce al apretar los dos maxilares, lo que también puede ocasionar bruxismo.
- Un tratamiento de ortodoncia para recuperar la alineación mandibular y restablecer la normalidad de la mordida. Después los resultados de la ortodoncia se mantendrán con el uso de una férula, que también servirá para tratar el bruxismo.