El cólera es un infección intestinal aguda causada por una bacteria, la Vibrio cholerae, que está presente en aguas y alimentos contaminados por heces. Es, por tanto, una infección muy relacionada a condiciones de salubridad deficiente especialmente relacionadas con el suministro de agua potable, como las que pueden darse en países poco desarrollados o en situaciones de emergencia por catástrofes naturales, por ejemplo terremotos.
En su forma más grave el cólera se caracteriza por la aparición repentina de una diarrea acuosa aguda que causa un cuadro de deshidratación cuya gravedad puede incluso causar la muerte en muy pocas horas. Además, hay que tener en cuenta que el periodo de incubación de la infección es muy corto (oscila entre las 2 horas y los 5días), lo que incrementa la posibilidad de que se produzcan brotes epidémicos, dada la facilidad de contagio que conlleva.
Prevención del cólera en viajeros
La prevención del cólera tiene una especial importancia cuando se viaja a zonas geográficas endémicas o que circunstancialmente registran un alto riesgo de brote epidémico (zonas catastróficas, grandes asentamientos de refugiados, etc.).
La primera medida recomendada es la vacunación. En la actualidad se dispone de dos vacunas anticoléricas que ofrecen una protección del 80-90% a corto plazo y superior al 50% al cabo de dos años en condiciones de endemicidad. Se administran por vía oral en dos dosis espaciadas entre sí de una a seis semanas.