La sintomatología inicial de la demencia y su posterior evolución depende de cuál sea su causa. Hay demencias primarias y otras secundarias a determinadas enfermedades. Las demencias primarias son enfermedades neurodegenerativas en las que la demencia es el síntoma principal y surge directamente del deterioro cerebral, mientras que las demencias secundarias son el resultado de otras enfermedades o condiciones que afectan el cerebro, como infecciones o traumatismos.
La mayoría son irreversibles, pero en algunos casos es posible recuperarse eliminando la causa. En cualquier caso, y teniendo en cuenta que no deja de ser un síntoma asociado a una enfermedad, puede decirse que hay distintos tipos de demencia.
¿Cuáles son los tipos de demencia
Existen varios tipos de demencia que afectan a las personas mayores, entre los que destacan la enfermedad de Alzheimer, responsable de aproximadamente el 60% de los casos y caracterizada por la pérdida progresiva de memoria y capacidades cognitivas; la demencia vascular, causada por accidentes cerebrovasculares que afectan el suministro de sangre al cerebro; la demencia por cuerpos de Lewy, que incluye fluctuaciones en el deterioro cognitivo, alucinaciones y síntomas similares a los del Parkinson; y la enfermedad de Pick o demencia frontotemporal, que afecta principalmente el comportamiento, las emociones y las habilidades sociales.
Estos cuatro tipos de demencia son los más frecuentes, aunque hay otros que dependen de su causa: la demencia alcohólica, la demencia metabólica, la originada por infecciones que pueden afectar a la función cerebral, etc.
A continuación, detallaremos cada una.
Enfermedad de Alzheimer
La enfermedad del Alzheimer es la causa de aproximadamente el 60% de los casos de demencia siendo más frecuente en las mujeres de entre 65 a 90 años, aunque puede aparecer también en torno a los 40 años. Se trata de una enfermedad neurodegenerativa y por tanto progresiva que afecta a las neuronas de la corteza cerebral y de zonas próximas.
Suele iniciarse con una pérdida de la memoria reciente y de la capacidad de aprendizaje, afectando posteriormente a la memoria remota y ocasionando un progresivo deterioro cognitivo y funcional que concluye con el fallecimiento del paciente en un plazo de tiempo variable pero que puede alcanzar hasta los diez años desde el momento del diagnóstico.
Demencia vascular
La demencia vascular es causada por accidentes cerebrovasculares, como el infarto cerebral o ictus. La sangre deja de irrigar la zona del cerebro afectada provocando la muerte de las neuronas y causando la pérdida de funcionalidad. En algunos casos la demencia aparece tras sucesivos accidentes de este tipo que pasan desapercibidos por carecer de síntomas que lo delaten, hasta que uno de ellos es lo suficientemente importante para ocasionar síntomas neurológicos (como la parálisis lateral parcial o total y signos de deterioro cognitivo. Éste es el único tipo de demencia que se puede prevenir.
Demencia por cuerpos de Lewy
La demencia por cuerpos de Lewy se caracteriza por la formación en distintas zonas del cerebro de depósitos anormales de proteínas que afectan a la actividad de determinados neurotransmisores y, como consecuencia, alteran el comportamiento, la percepción y el pensamiento de los pacientes. El deterioro cognitivo se produce lenta y progresivamente, pero lo más característico de este tipo de demencia es que éste no es constante, sino que fluctúa, en ocasiones mejorando y en otras intensificándose.
Son habituales las alucinaciones (olfativas, auditivas, gustativas y táctiles), los trastornos del sueño y alteraciones del comportamiento y del estado de ánimo que pasan de un extremo a otro. También pueden aparecer síntomas similares a los de la enfermedad de Parkinson (temblor, dificultad en la marcha o rigidez muscular), lo que en ocasiones obliga a realizar un diagnóstico diferencial.
Enfermedad de Pick
La enfermedad de Pick también se la conoce como demencia fronto-temporal por la localización (lóbulos frontal y temporal) de las lesiones cerebrales causadas por la presencia de cuerpos y células de Pick (una forma anormal de la proteína tau). Esta enfermedad aparece habitualmente entre los 45 y los 65 años y la demencia que causa afecta fundamentalmente al área del comportamiento, las emociones y las habilidades sociales, aunque también se ven afectadas la capacidad de leer y escribir, la memoria y el tono muscular. Su progresión es lenta y llega a incapacitar totalmente a quien la sufre.